Vivimos en un mundo en el que el valor de cada minuto y de cada hora es vital, nos falta tiempo para todo y curiosamente es nuestro tiempo, ese que nos falta, el que vendemos a nuestros clientes; aprovechando que acabamos de volver de vacaciones y hemos podido disfrutar de mucho tiempo para nosotros, parece buen momento para reflexionar sobre cómo podemos dar más valor a nuestro tiempo y valor no es siempre sinónimo de dinero.

Sí es cierto, nuestros servicios profesionales se tarifan por horas, aquellas que vamos a emplear en realizar nuestro trabajo, ya sea una auditoria, un asesoramiento legal, fiscal, laboral o un proyecto de consultoría, pero ¿y esas horas que no somos capaces de saber en qué las hemos empleado?, Quizá estuvimos hablando con nuestro cliente sobre diversos asuntos generales, quizá nos llamó para consultarnos alguna duda, o estuvimos buscando información sobre alguna cuestión relacionada, todo ese tiempo, no es tiempo perdido es tiempo invertido, cuantas veces lo hemos oído, pero es la verdad, es la única manera de construir un negocio y de mantener a unos clientes que terminan convirtiéndose en una parte esencial de cualquier organización.

La Fundación Prodis

A veces ese tiempo del que “no” disponemos puede emplearse de otra manera, también con nuestros clientes, en Audalia Nexia, ayudamos a varias Fundaciones cuya labor social es indudable y tremendamente necesaria y este año hemos querido acercarnos a conocer aún más a la Fundación Prodis, organización sin ánimo de lucro con la que llevamos trabajando más de 20 años y que organizaron para nosotros un taller de sensibilización como manera de acercar el entorno en el que conviven los jóvenes con Síndrome de Down a la sociedad; pasamos una mañana completa aprendiendo mano a mano con ellos cómo trabajan y cómo construyen su futuro para poder manejarse en la vida diaria y laboral de la manera más independiente posible; nos dejaron sorprendidos por su locuacidad y entusiasmo para contar lo que hacen y lo que han conseguido.

Conocimos también la labor de los voluntarios y el personal en general de la Fundación y su organización interna para poder llevar a cabo el objetivo de integración socio laboral de estos chicos y todo ese tiempo que pasamos con ellos, sin duda fue un tiempo invertido y de enseñanza para todos, entre otras cosas para valorar lo que tenemos y emplear el poco tiempo del que dispongamos en labores sociales como puede ser la de colaborar con una organización sin ánimo de lucro que lo único que puede reportarnos es satisfacciones.

Valoremos nuestro tiempo.

Belén CarvajalLinkedin_circulo